jueves, 17 de julio de 2008

Crisis de los Valores en la Educacion

CRISIS DE LOS VALORES EN LA EDUCACION

Unas de las mayores productividad es el permitir, que cada generación, sea mejor que las anteriores, en muchos sentidos: productos y métodos superiores, así como un mejor uso de los recursos, ya sean materiales y humanos, también nos ayuda a crear lo que se ha denominado en la jerga de la gestión moderna creativa, de modo que a todos y no solo a los capitalistas y productores de bienes y servicios.

Es obvio que existe poca conciencia de este ultimo punto en el medio gubernamental, a todo nivel y a cualquiera de los poderes públicos de una nación.

Así la productividad y el bienestar pasa primero por un ataque sistemático y sincero de la crisis de los valores.

También podemos decir que no solo existe poca conciencia, de este ultimo punto ya que son muy pocas las personas que toman conciencia de los valores ya nombrados; sabiendo que son de mucha ayuda, ya que la crisis comienza por dichas personas, ya que son incapaces de seguir adelante, sabiendo que estos son unos de los primeros problemas actuales y mas si lo hacemos en referencia con la educación.

Los valores debemos de hacerlos respetar tomando en cuenta, que en la educación debemos de darle un mayor valor, tanto significativo como auto evaluativo; con el fin de hacer valer nuestro rol, como educador ya que debemos tener muy en cuenta que nuestro saber cual es su estructura o esencia, antes de señalar fines y medios.

Toda pedagogía es ciencia profunda del hombre, lo cual debemos de saber definirlo a ciencia cierta de lo mas común, hacerlo mas interesante de los valores.

En la actualidad nos podemos dar cuenta que los valores humanos, se han ido perdiendo poco a poco, y los han ido tomando como si no tuvieran importancia alguna.














Si hoy los seres humanos estamos creciendo enormemente hacia fuera, la educación debe permitir al ser humano conocerse y valorarse para irse realizando en libertad, y en solidaridad. En fin promover y garantizar las competencias fundamentales para una sana convivencia.

Hay que tener presente el valor del hombre como actor dentro de las instituciones. La sociedad demanda de estas, los cambios que obligan al manejo de una gerencia eficiente, con formas de pensar, decidir y actuar diferentes. El éxito en los cambios, radica en la capacidad de la gente para cambiar, desarrollarse y crecer.